Cuando una mujer está pensando en un embarazo o ya está embarazada, la alimentación es crucial ya que impacta el desarrollo del bebé. Hoy te contaremos sobre las grasas buenas.
El DHA es un tipo de grasa buena Omega 3, representando el 97% de las grasas del tejido cerebral. Es una grasa estructural importante que el cerebro necesita para un desarrollo óptimo desde antes de nacer.
Es a través de la placenta y luego la lactancia que la madre entrega ácidos grasos de forma activa al hijo. Juega un rol fundamental el tipo de grasa que la madre consume, donde se debe garantizar el aporte de DHA, tanto en la alimentación como durante el embarazo. Esto determina la composición de los tejidos grasos de reserva, como en la dieta al momento de amamantar.
Si este ácido graso Omega 3 DHA se aporta en cantidades suficientes, estos niños podrían en largo plazo:
- Desarrollar una mayor capacidad de sociabilización con otros niños.
- Ser niños menos agresivos.
- Podría apoyar el proceso de aprendizaje.
(Según estudio publicado por investigadores de la Universidad de Chile: Prostaglandins, Leukotrienes and Essential Fatty Acids 2018; 139: 25-30)
¿Cómo debería consumirse el Omega 3 en el embarazo?
En Chile la realidad es que las mujeres aportan bajos niveles de DHA a sus hijos por medio de la placenta y lactancia porque presentan altos niveles de obesidad, bajo consumo de pescados grasos y alta ingesta de Omega 6 en la alimentación. Aceite de soya, maravilla o girasol que son los aceites que más se consumen y, aceite de maíz que se usa en los alimentos procesados aportando un exceso de Omega 6.
La alta ingesta de Omega 6 y el bajo consumo de pescados grasos, lleva a recurrir a la suplementación de Omega 3.
¿Por qué recurrir a la suplementación?
El bajo consumo de pescado en nuestro país, hace que la población disponga de bajas fuentes directas de DHA, por eso se requiere suplementar.
Esto debe ser constante y permanente porque el cuerpo no lo reserva y cuando se suspende su consumo los efectos empiezan a decaer y los beneficios empiezan a desaparecer. Esto es debido a que nuestra alimentación prácticamente no aporta DHA.
¿Cuánto Omega 3 DHA se debe consumir en el embarazo y lactancia?
La recomendación de organismos internacionales de nutrición para embarazo y lactancia es de 500 mg de DHA al día, para complementar la dieta de una mujer durante este período.
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