¿Por qué sentimos que en diciembre estamos más estresados o ansiosos? A fin de año nos enfrentamos a diferentes cierres. de periodos escolares, académicos y laborales, por lo que hay evaluaciones que rendir, balances que realizar, mientras que al mismo tiempo se organizan paseos, fiestas de fin de año, ceremonias. Se anticipa la cercanía de la navidad, año nuevo y vacaciones.

Todo esto, junto a una tendencia natural a hacer en estas fechas un balance del cumplimiento de metas también en lo personal genera una presión por rendir y aumento de ansiedad, que a veces perturba el buen desempeño, a lo que sigue una sensación de inefectividad, que incrementa aún más la ansiedad, apareciendo temor a fracasar, sufrir, defraudar, etc. En este contexto el cerebro recibe un mensaje de “peligro” y echa a andar los mecanismos de alerta habituales y respuesta de estrés.

Algunos consejos importantes y prácticos pueden ayudar a minimizar el estrés que acompaña a las fiestas

Planifica con antelación

Entre compañeros de trabajo, amigos y familiares, es inevitable que algunos compromisos acaben coincidiendo con el mismo día. Asegúrate de planificar lo que puedas para no estar con la agenda tan colapsada que no tengas tiempo para el descanso.

Di que no

Con los compromisos de fin de año, no pasa nada por decir que no a unos cuantos. Además, te ayudará a aliviar el estrés sin duda.

Mantener los hábitos saludables

Las vacaciones son famosas por arruinar los hábitos saludables. Sin embargo, hay cosas que, sí puedes hacer, por ejemplo, seguir o incluir una rutina de ejercicios con tu familia, ¡¡Siempre es más entretenido en grupo!! Disfruta probando nuevas preparaciones, alimentos de temporadas, date el tiempo para comer y compartir, recuerda que estos factores ayudan a tener una microbiota o flora intestinal equilibrada, rica en bacterias beneficiosas, y esa es la base para tu salud. Al regresar retoma tus hábitos, no pasa nada…

Comparte tus sentimientos

La temporada de fiestas y celebraciones muchas veces no es tan alegre para todos. También es una época donde uno recuerda a los que no están. Acepta esos sentimientos y comparte tus emociones con amigos y familiares.

Sé realista

Las fiestas no tienen por qué ser perfectas ni iguales a las del año pasado. A medida que las familias cambian y crecen, las tradiciones y los rituales suelen cambiar también. Escoge algunas para mantenerlas y muéstrate abierto a crear otras nuevas. Por ejemplo, si tus hijos adultos u otros familiares no pueden ir a tu casa, busca nuevas formas de celebrarlo juntos, como compartir fotos, correos electrónicos o vídeos. O reúnanse virtualmente en una videollamada. Aunque tus planes de vacaciones sean diferentes este año, puedes encontrar formas de celebrarlas.

Tómate un descanso

No te olvides de tus propias necesidades. Duerme una siesta, da un pequeño paseo, lee un libro o ve una película divertida. Reírse relaja todo el cuerpo y alivia la tensión física y el estrés. Sé consciente de cómo la cultura de la información puede producir un estrés excesivo, y ajusta el tiempo que dedicas a leer las noticias y las redes sociales como consideres oportuno.

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